Esta semana fui al teatro con mis padres, les invitaba yo como una especie de regalo navideño tardío. El aliciente principal de esta obra era poder disfrutar de dos grandes de la interpretación como son José Sacristán y Héctor Alterio. Por esta parte se cubrieron plenamente las expectativas: contemplar en privilegiada primera fila a estos dos actorazos, a los que estaba acostumbrado a ver a través de un pantalla, ha sido todo un lujo.
La velada hubiera sido perfecta si la obra que defendían hubiera dado más de sí y no fuera simplemente discreta y entretenida. En pocas palabras, "Dos menos" es la tragicómica historia de dos enfermos a quienes les comunican que les queda una y dos semanas de vida respectivamente. Ante la tremenda noticia, deciden escaparse del hospital para exprimir sus últimos días viéndose envueltos en aventuras ajenas y saldando alguna cuenta pendiente.
Del mismo modo que la música en directo siempre es un aliciente aunque quien actúe no sea tu músico predilecto, una obra normalita siempre vale la pena si tienes en el escenario a Sacristán y Alterio. Para rematar la noche y a cambio de haber pagado las entradas, mis padres correspondieron y me invitaron a una estupenda cena en La Mora.
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